VENEZUELA: Un campo en sangre es un diluvio sin arca…

Venezuela es un aquelarre de gritos silenciosos,
una legión de incautas distopías,
el Edén es un pupilo ante las maravillas de este país poderoso,
con escudos de cartón,
espadas de aluminio,
yelmos que cobran vida,
la Liga de la Justicia no es una ilusión,
hay héroes sin capas en casa esquina,
no hay diferencias entre longevidad e infancia,
todos clamamos el mismo sueño de soberanía,
la libertad es un feto que crece en el vientre de la esperanza,
un solo pueblo, una misma raza,
nuestro desahucio hace eco,
en los oídos de la tiranía,
no es más valiente quien usa un arma,
sino el que resiste desnudo el impacto de un proyectil;
Y aún heridos el alma aguarda,
la pobreza es voluntad,
un río seco es sed de paz,
un campo en sangre es un diluvio sin arca,
¡Aquí se salva el que aguanta!

PANDEMIA

 

18301797_10154295723005059_1487500604117360232_n

En Venezuela se desató una pandemia de corazones sin reparo,
de miradas que delatan hambre,
hambre de sosiego y libertad,
una estructurada cadena con eslabones perdidos,
de presunta tristeza disfrazada de azafata en vuelos de esperanza,
lágrimas venerables,
que devienen de ausencias en su mayoría insalvables.
¡Las heráldicas estrellas son pecados capitales!
El tricolor es vinotinto porque se ha convertido en un dispensador de sangre.

#ANDIOR
#SoyAnDiOr
#AnDiOrIRREVERENTE

CAPÍTULO -Ciento y pico- «2017»

Al final la flecha llegó al hueso, perforó músculos y arterias;
Y caló.
Se trataba de un corazón ya fracturado,
sístole, diástole, repletas de demonios,
poca sangre caliente,
por eso mis manos frías,
por eso mi tristes ojos,
pero no guardaban ya tristezas
estabas vacíos para llenarse de nuevas tempestades,
-yo apostaba a la felicidad, pero ella tan fortuita e inoportuna-
dilatados también, para contemplar luz y belleza donde otros veían oscuridad,
asertivos a la magia sin conejos,
¿Qué esperaban? ¡Soy escritora!
es imposible no sentir, no apasionarme, no distraerme, no ahondar con entusiasmo en las pequeñas cosas, por las que soy capaz de desnudarme en letras,
¿Qué pretendían? ¿Qué no sintiera?
yo estoy llena de sentimientos,
que en su mayoría yo misma no entiendo,
Pero soy genuina y real, yo amo con osadía, río con estrépitosa alegría y no lloro… ¡Profusamente lluevo!
Entonces ¿cómo no inmortalizar cientos de tomos, usando su nombre como duende?
Yo creo en las causas de las cosas justas,
de lo que no está escrito pero sucede,
creo en los besos bajo las estrellas,
creo en las mentes empoderadas,
a veces incluso en las mentiras,
en los suspiros y en las paredes, que ahogan gemidos y crean musas,
Tengo certeza de lo que quiero,
aunque mi norte parezca incierto,
me preparo para intensas batallas contra dragones, pero termino devorada por las hormigas,
le tengo miedo a algunos santos,
sobretodo al que te apadrina,
pues roba a los inocentes,
Y da medallas a quien subestima,
pedacitos de inconstante cielo,
con una luna para no aullar,
que se aprovecha de las almohadas,
de los «NO amantes»,
en su lucha para no amar,
flotan inertes en la corriente,
de una concurrida pasión,
que se empeña en ser fantasma,
que mi sonrisa no los confunda,
esa flecha que me gustaba me dio a mi en el talón. ¡Me he convertido en TroyANA!
#ANDIOR
#SoyAnDiOr
#AnDiOrIRREVERENTE

CAPÍTULO 109 «2017» -Venezuela y su NO independencia-

Lo dijo el buen Neruda «Para tu libertad bastan mis alas»; le responde esta extraña Ana ¿De qué nos sirven las alas si no sabemos volar?
 
Juan Lovera dejó en su oleo constancia de venezolanos revolucionarios, pero no en el malversado sentido de la etiqueta #Revolución que ha asignado el moribundo gobierno, somos los descendientes de esa corajuda sociedad, ahora un poco más sabia, mucho más pobre y definitivamente cruenta; ¡Aquel 19 de Abril no se derramó sangre! pero ahora no tenemos a un Emparan capaz de dimitir con humildad, porque pese al absolutismo, fue varón humilde, que tras la solicitud del pueblo, no “quiso mandar más”; nuestro nuevo “Capitán General” es un Nicolás, le acompaña un circo de babuinos con corbatas rojas y bolsillos llenos de verde, con la absoluta determinación de no escuchar a los congregados ahora en esta Plaza Mayor de 916.445 km² que lleva siglos creyéndose libre y soberana y ha crecido en medio del escepticismo de que con una vez era suficiente; dos siglos después aún muchos parecen convencidos de vivir en libertad.
 
Aparentemente mucho menos tenemos a un ejército valiente que honra, cuida y respeta a la patria a la cual también pertenecen, nada heredaron de aquellas Fuerzas Armadas de hace 207 años, que bajaron sus armas y se unieron a la lucha por la independencia; necesitamos quizás a un nuevo Francisco Salias que sea capaz de tomar por el brazo a este nuevo Emparan y lo obligue a dar la cara (¡A pesar de los huevos!) al pueblo que ni siquiera le confiere la nacionalidad y con ello, esta encarnación de “ Hidalgo y Pancho” sin Sancho , quizás con panza ¡Que importa! otro Francisco ( y sueño con la utopía que tenga visión de Miranda) ganar la ovación, apoyo y aplausos de los soldaditos desplomados y del resto de la sangre tricolor que han perdido las estrellas, tras seguir con fervorosa adicción a la Liga de los Villanos de esta saga de 20 años, que han cambiado en detrimento la historia de nuestra tierra.
 
Yo firmaría cualquier Acta de Independencia ¡Y ayudaría a redactarla! que destituya por fin a esta Capitanía General CUBANA, escuchen bien: ¡No lo queremos, no lo queremos!
Para ser América, primero seamos Venezuela, que Si existe en Nación y como aquellos cantos frente a los calabozos de quienes merecían exilio, elevamos también con orgullo nuestro himno, a las carracas que esperan a todo el circo babuino, “sí el despotismo levanta la voz seguid el ejemplo que aquella Caracas de 1810 dio”.
 
¡Abajo Cadenas!
#ANDIOR